El club maño supera todas adversidades en su debut histórico en categoría nacional
Con una plantilla confeccionada para competir en regional y con menos de un mes de
margen para planificar lo que les venía encima, el CD Valdefierro ha obrado el milagrode demostrar que la manzana envenenada que le planteó la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) podía endulzarse a tiempo.
La renuncia de la SH Huesca B a
Tercera RFEF (grupo III) a pocas semanas del inicio de
la competición planteó un reto mayúsculo en el club del barrio zaragozano de Valdefierro. Un ascenso imprevisto y que les obligaba a aceptar en cuestión de horas elrecorrido hacia un desconocido mundo o empezar de nuevo en la Preferente aragonesa. Finalmente, la dirección deportiva dio un paso valiente y la travesía por Tercera RFEF ha sido el camino correcto con destino final permanencia.
Junto a la plantilla y cuerpo técnico, el director deportivo Luis Aranda ha sufrido en sus
propias carnes un camino durísimo hacia la permanencia. Una temporada agónica con un final feliz y que ahora se disfruta. El responsable de la confección de la plantilla del equipo de Raúl Jiménez expresa en Futboleras el largo camino que ha recorrido el equipo hacia la salvación y las dificultades que ha tenido que superar el club.
Desahogados sería la palabra que mejor definiría el estado actual en el CD Valdefierro
La verdad es que sí. La victoria que logramos en Fontsanta (1-3) nos dejó bastante tranquilos.
De qué manera puede cambiar el estado de ánimo y situación de un equipo en tan solo un mes.
Nosotros teníamos claros cuáles eran nuestras finales y los partidos en los que te lo jugabas todo y en los que podías rascar. El equipo estaba dando muy buenas señales y sensaciones ante rivales fuertes de la parte alta. Se debe reconocer que vivíamos
partidos ajustados y la pérdida de nuestra goleadora (Ana Vinue) durante tres meses no ayudó y lo pasamos mal.
El gol es caro y no todo el mundo tiene la capacidad de hacerlo. Se sufrió durante esas jornadas. El trabajo del equipo es una animalada y el crecimiento del equipo brutal.
¿Se tenía conocimiento de la liga y los rivales?
Nosotros teníamos conocimiento de la competición ya que ya habíamos hecho un trabajo de scouting de la categoría y había un control de los rivales que se enfrentaban a Stadium y Zaragoza. No teníamos un desconocimiento de los equipos catalanes ni tampoco baleares. Son equipos de mucha categoría y el grupo 3 de Tercera RFEF es el que más nivel sin ninguna duda.
¿Qué mensaje se le transmitió a la plantilla antes de arrancar la temporada?
La idea que teníamos era pelear cada punto desde la primera jornada. El 3 de agosto se nos comunicó el ascenso, cuando parte de la plantilla estaba de vacaciones, con sus días de descanso durante ese mes y nos quedamos todos impactados.
Empezamos la temporada muy tarde y no se pudo competir en las primeras siete jornadas. Nos dedicamos a mejorar la plantilla y ponerla a buen tono físico para llegar en las mejores condiciones en nuestras finales. Y así fue.
Otros de los hándicaps fue que la plantilla no estaba diseñada para competir en Tercera RFEF sino en Primera Territorial para ser un rival muy duro. Al final ya no se pudo fichar ninguna jugadora más y el club tomó también la decisión de confiar en el bloque inicial y se respeta. Este equipo acumula dos ascensos, desde Segunda Territorial y el primer punto del club es confiar en las jugadoras que nos han traído hasta aquí, con el mayor número de componentes posibles.
El Valdefierro es una familia y ellas han sido las que nos han traído hasta aquí.
Riudoms y Sant Gabriel, las finales superadas
No son rivales peores que nosotros. Quizá Sant Gabriel es el equipo más frágil de los dos y Riudoms me ha gustado mucho el trato que tiene con el balón. Sabe a lo que juega.
Tampoco es sencillo adaptarse a Tercera RFEF, pero en las últimas temporadas se ha demostrado entre los equipos aragoneses que se rompe este prejuicio
El hándicap que quizá tenemos en Aragón es el volumen de jugadoras que puedan competir en Tercera RFEF. A la hora de incorporar jugadoras con cierto peso específico es complicado, pero poco a poco mejora el nivel territorial. Se está trabajando cada vez mejor y aumenta el nivel aragonés. En Baleares ocurre algo similar y el salto no es tan grande en Cataluña. Nosotros competimos en dos o tres partidos en toda una temporada en nuestra Preferente y ascender a Tercera RFEF supone quizá un doble salto de categoría.
A nivel persona, ¿es el mayor reto deportivo al que se ha enfrentado?
Sin duda. Nos han ocurrido muchas cosas y ninguna nos ha ayudado a disponer de mejorar herramientas: vacaciones, planificación, rivales, pretemporada....
¿Hay margen de crecimiento?
La plantilla tiene ganas de seguir demostrando hasta donde se puede llegar y el proyecto deportivo sigue activo. Todos los responsables de este equipo tienen ambición a corto plazo con el proyecto que tenemos en mente. La idea es dar un salto en los próximos años y ver hasta donde podemos llegar.