El Barça es Campeón de Europa, algo que cuesta de asimilar por todo lo que significa para ellas. Por el pasado, por el presente y por el futuro. Su futuro.
Han pasado más de 24 horas y sigue pareciendo irreal.
El FC Barcelona es campeón de la Champions. Por primera vez en la historia, un equipo español ha ganado la Champions. Con Aitana Bonmatí como MVP de la final. Con Jenni Hermoso como máxima goleadora de la competición. ¿No parece una barbaridad leerlo en voz alta? Pues es que lo es. Este equipo y estas jugadoras llevaban años llamando a la puerta de la gloria deportiva, pero esta se resistía, no había nadie al otro lado que la quisiera abrir. Y, al final, como en las mejores historias deportivas,
las futbolistas del Barça decidieron reventar la puerta y convertirse en leyendas. Porque esto es lo que son y así deben ser recordadas, como leyendas y pioneras del fútbol femenino español.
Hay mucho – y todo bueno – que destacar de lo que está haciendo el Barça futbolísticamente, pero vivir este triunfo desde el Gamla Ullevi, estar en Gotemburgo para disfrutar de una nueva final de Champions… sólo sale hablar de emociones y del camino recorrido. Ese cosquilleo cuando queda un día o pocas horas para que empiece el partido y algo te dice que disfrutarás de una cita histórica, el momento en el que pisas el estadio y te das cuenta dónde estás, ver la alineación inicial con Alexia en el 11 o la sensación de que “todo saldrá bien” cuando el Barça se adelanta en el marcador a los 33 segundos con un gol de rebote. Todo estaba listo para que las azulgrana ocuparan el trono europeo, tal y como se visualizó en el año 2015.
“Cómo la has clavado” le dijo Alexia a Xavi Llorens una vez acabado el encuentro. El entrenador catalán fue uno de los pilares fundamentales para la profesionalización del fútbol femenino culé ese verano de 2015, con el objetivo final de colocar al Barça como campeón de Champions un lustro después. Solamente las protagonistas saben a ciencia cierta todo el camino recorrido y lo que ha costado completarlo con éxito, en lo que ha sido una etapa llena de victorias, pero en la que un mal resultado ha marcado muchísimo más que un triunfo holgado. A este Barça nadie le ha regalado nada, no se equivoquen, buena prueba de ello son las lágrimas de Melanie Serrano tras 17 temporadas en el primer equipo. Este equipo ha recibido muchos golpes y se ha sabido reponer para volver con más y mejor nivel.
El penalti que Paños le para a ‘Soni’ en el Miniestadi en 2017, pero que tras el rechace se convierte en el gol que le da la liga al Atlético, la destitución de Fran Sánchez en enero de 2019 – pese a estar invicto en liga – tras empatar a 0 en casa contra el Espanyol o, el ejemplo más claro, Budapest. Porque de todas las derrotas se puede sacar una lección, pero la abultada derrota en la final de la Champions contra el Olympique de Lyon sirvió para añadir páginas y pulir los detalles del guion que indicaba como llegar a la cima europea. Por suerte nuestra, Andrea Pereira “filtró” algunas de las notas de ese guion y compartió en Twitter los pilares para pasar de una derrota 0 a 3 en el minuto 20 en la final de Budapest a una victoria por 0 goles a 3 en la final de Gotemburgo.
En 2015, cuando poca gente sabía que Carli Lloyd había marcado un hat-trick en la final del Mundial de Canadá, el Barça decidió apostar en firme por su fútbol femenino. En 2021, solamente en TV3, 1.600.700 espectadores vieron el partido que llevó a la gloria máxima al equipo culé. El club catalán ha crecido a pasos de gigante, igual que el fútbol femenino español. Un deporte que interesa al gran público, los números lo demuestran, y que da resultados cuando se invierte en él. Pero no sólo hay que invertir en el presente del fútbol femenino, también en el futuro. Cuando Vicky Losada, completamente desbordada por las emociones, dijo en TV3 que estas jugadoras han abierto las puertas a muchas mujeres y que ahora las niñas tienen un espejo en el que mirarse, tenía toda la razón. Así que solo queda pedir a los señores de traje y corbata que no se atrevan a quitar ese espejo, que estas mujeres se han ganado serlo.
Ah, que casi se me olvida. La meca no es el fútbol masculino. Parece ser que para para valorar como es debido un éxito como este haya que recordar tiempos pasados en los que los hombres del FC Barcelona dominaban el mundo del fútbol. Y no. No es necesario comparar a este equipo con sus homólogos masculinos para dar valor a lo que ha conseguido. Han ganado la Champions. Son el mejor equipo del mundo. Y tienes los mimbres para seguir siéndolo en los próximos años.