La española llegó al país nipón en 2019 para entrenar al equipo masculino Suzuka Unlimited de la cuarta categoría. Este año va por un nueva temporada con el objetivo de llegar en unos años al fútbol profesional
Una mujer que se atrevió por instalarse en Japón y romper las barreras del fútbol. Milagros Martínez ha estado cerca del balón desde pequeña cuando jugaba en su pueblo junto con chicos, era la única de su familia que le gustaba este deporte. Su primera experiencia como entrenadora comenzó en el Fundación Albacete con un equipo de niñas pequeñas en el que destacaba Alba Redondo.
Después da el gran salto para entrenar al primer equipo, que en ese entonces estaba en segunda división y consiguieron ascender a primera categoría. Los siguientes años trabajó en regional de Castilla - La Mancha hasta que llega un nuevo desafío: el llamado desde Japón. Tomó sus maletas y se fue a la aventura por el continente asiático para convertirse en la primera mujer entrenadora de un equipo en la competición japonesa.
¿Cuáles son los principales desafíos que has enfrentado en Japón?
El desafío mayor es el idioma y un poquito también la cultura. Cuando llegué los jugadores estaban un poco distantes al principio, que es lo normal con los entrenadores. Aquí los técnicos son muy rectos y distantes con ellos, apenas tienen relación, por lo visto, tienen un carácter bastante fuerte. Yo igual soy de carácter fuerte, pero intento mantener con ellos buen rollo, si algún día nos vamos de cena me tomo con ellos alguna cerveza, les pregunto mucho por la familia. Entonces he intentado acercarme a ellos y ganarme su confianza, que aparte del trabajo, donde les enseño mucha táctica, es ahí donde ellos al final se han mostrado con más confianza. Pasamos muchas horas juntos y buscamos el bien común, yo creo que eso al final es muy importante. Entonces salvamos un poco la barrera de la cultura y el idioma con ese acercamiento, con la confianza y relacionarse unos con otros.
¿Cómo has visto el fútbol femenino en aquel país?
Pude acercarme a ver algún partido y entrenamiento de los equipos, la verdad que es un fútbol bastante atractivo, son equipos que buscan ir al ataque, lo que pasa es que muchas veces va más por físico que por un táctica. Son jugadoras que físicamente son muy buenas, no muy altas pero que te pueden correr los 90 minutos al mismo nivel. En el aspecto técnico no he visto detalles de los que en España ya estamos muy acostumbrados a ver. Y ahí yo creo que tienen un poquito de carencias.
Y sobre la cultura deportiva, ¿cómo es?
Las ligas aquí son diferentes. Todo el mundo pasa por la universidad y las chicas y chicos no empiezan a competir a nivel Senior, entonces llega un momento que con 22 años la mayoría no ha competido en ligas importantes, eso yo creo que influye en la evolución de los jugadores. A nivel de aficionados cada vez es mayor, el hecho de que viniera Iniesta, Podolski, Villa ha permitido que el fútbol japonés haya aumentado bastante en este aspecto. Por ejemplo en nuestra cuarta categoría que es semiprofesional, podemos llegar a jugar partidos con cinco mil personas en las gradas. En femenino por ejemplo, he ido a partidos donde hay entre 2.500 a 3 mil personas.
¿Cómo ha sido la evolución del equipo?
El año pasado fue el primero en esta categoría, el equipo venía de ascender y fue una temporada complicada, sobre todo al principio. Llegué con la idea de que ellos sabían una forma diferente de la ya pensada y al final empecé de 0 y con eso he aprendido mucho, hace que intentes tener controlado todo. Repasas muchos vídeos al no poder comunicarme con ellos, acá eso nos sirve mucho para ver errores y corregir. Les encanta que les mande vídeos de la liga española. Corregimos la manera de trabajar para lograr que encajen con lo que nosotros queríamos. Entonces el objetivo de esta temporada es mejorar, porque en dos años el equipo quiere estar en liga profesional, para eso se necesita estadio propio que es lo más complicado y están en proceso de construirlo, entonces se espera que para dentro de dos temporadas sea posible. Por mientras es estar en los puestos de arriba aunque aún no podamos tener la opción a la siguiente categoría. Pero estoy muy contenta con la experiencia y deseando que se acabe este tema del coronavirus para empezar la competición.
¿Qué te parece la llegada de entrenadoras al futbol femenino español?
Creo que fuisteis vosotras que sacaron un dato con los números de entrenadoras. La verdad es que yo no lo sabía, me enteré por Futboleras y de hecho lo comenté acá en el Instituto de Observantes en Tokio. Y bueno, poco a poco luchando para ser una opción real de cara a los equipos y directivos. Pero está costando mucho porque siempre se tiende a escoger a un entrenador aunque no tenga experiencia en fútbol femenino. Mucha gente dice que en el femenino no hay que tener experiencia, pero todas las categorías es muy necesario conocerlas, conocer los rivales y jugadoras. Se nos está apartando un poco de esas posibilidades, pero hay que intentar que cada vez se cuente más con nosotras. Sé que en Reto Iberdrola cada vez hay más posibilidades y ojalá todas mis compañeras que están allí puedan estar en primera.
¿Hay más entrenadoras en Japón?Soy la única y la primera en la historia de las ligas masculinas en Japón. En femenino está la seleccionadora, Asako Takakura, que fue una de las primeras jugadoras de Japon y ahora lleva a la selección, que yo sepa, es la única que está en un categoría superior. Creo que hay otras entrenadoras pero que están en ligas infantiles.
¿Cómo describirías el crecimiento deportivo de Alba Redondo?
Desde pequeñita ha tenido cualidades buenísimas, es una jugadora muy completa. Cuando la entrenaba, era una pasada la potencia que tenía y claramente aún la tiene. Recuerdo que el primer año en Regional de La Mancha, que era una liga senior, ella tenía 13 años y metió 40 y pico goles y era su primera vez en fútbol once. Ya se veía que era una chica que podía llegar muy lejos. Y en su debut con la Absoluta, siempre que entrenas a una jugadora y le pasan esas cosas buenas, que ficha por algún club grande o debuta con la selección, como que algo te toca, entonces estoy muy orgullosa y sigo teniendo contacto con ella.
¿Cuáles son tus aspiraciones como entrenadora?
Aquí la verdad que se está muy bien, pero sí se echa mucho de menos por todo lo que hay en España. Me gustaría entrenar a un equipo profesional en España, que también debe ser una experiencia muy bonita, que tengas ayudantes. También entrenar alguna selección me encantaría, por aquí en Asia alguna cosa se ha movido pero la oportunidad que estoy teniendo acá en Japón está siendo muy bueno, por eso el año pasado me quedé y este año creo que me vendrá muy bien para consolidar mi manera de jugar y entrenar. En principio es seguir viviendo de esto.