28 de noviembre de 2020. El
Racing Féminas recibe en Bezana al Real Oviedo, siendo líderes. Corre el minuto
59 cuando Yuki Togawa caza un balón en la medular. Isina tira la pared con
Carlota, para encontrar a Laurina dentro del área y gol. Jugada de manual.
Presión en bloque alto, juego efectivo e ideas claras. Es el Real Oviedo de
José Aurelio Crespo, un equipo esquematizado y preparado siempre para la
batalla. Lo que hoy se descubre, algo que en su momento solo pudieron
presenciar los espectadores del feudo racinguista, son las palabras que le
dedicó el técnico carbayón a Silvia Martínez, “Pinxis”, al terminar el partido
y comprobar que la capitana había felicitado, una a una, a sus rivales: “es un
privilegio encontrarme a jugadoras como tú en un terreno de juego”. Siete meses
después, capitana y entrenador se reencontrarán para compartir elástica y
objetivos.
Aun conociendo los descensos de
Primera Iberdrola de Deportivo Abanca, DUX Logroño, Espanyol y Santa Teresa, y
el encuadre de los tres primeros en el grupo norte de Reto Iberdrola, sobresale
en el panorama norteño la construcción del Racing Féminas por encima de la del
resto. A unas semanas de comenzar la pretemporada, los cántabros ya han
anunciado trece incorporaciones a la plantilla. A estas se suma la llegada de
José Aurelio Crespo para dirigir desde el banquillo. Con el técnico hablamos
sobre su llegada a Santander y el nuevo proyecto para la temporada 2021/2022,
que comienza por mantener la base encabezada por “Pinxis”, a la que espera
continuar viendo felicitar a sus rivales después de los partidos,
independientemente del resultado.
PREGUNTA. La pasada temporada en
el Real Oviedo fue, en balance, bastante positiva. ¿Qué le motivó a subirse al
proyecto del Racing?
RESPUESTA. El año pasado en el Oviedo
se hizo un muy buen trabajo, estuvimos muy ilusionadas durante toda la fase.
Pero llegó un momento en el que partíamos la segunda fase con desventaja y
había muy poco margen de error.
Esto es fútbol y se cierran
puertas, no nos ofrecen renovación después de cuatro años. A la semana recibo
la llamada del Racing. Hablar con el presidente es muy fácil y llegamos a un
acuerdo rápido. Ellos querían que me sumara y yo quería hacerlo, así que en
escasos quince minutos teníamos cerrado el acuerdo. A partir de ahí,
tremendamente ilusionado.
P. ¿Qué se le propone en esa
llamada? ¿Es un proyecto gestado desde antes de su fichaje?
R. Creo que más que la propuesta,
lo que me llama es el interés depositado en mi persona, sobre todo para un
proyecto nuevo. Hay muchas caras nuevas. Caras, como digo yo, “por grupos”.
Llegan dos jugadoras de un equipo, otras tres o cuatro de otro… No se trata de
unir a veinte jugadoras, sino a pequeños grupos que sepamos cómo funcionan.
Creo que es lo que más me atrae del proyecto. También la proximidad es una
ventaja. Debemos ser realistas, en el fútbol femenino nos queda mucho por
avanzar. Nosotros, Andrea Suárez, segunda entrenadora, y yo, vamos a ir y venir
desde Oviedo para cada entrenamiento y partido. Todos seguimos trabajando, a
parte de la labor en el club, seguimos madrugando, las jugadoras tienen que
desplazarse… No hay que olvidar que todavía no son profesionales y han de
complementar el fútbol con trabajos o estudios.
Es un poco eso. Santander,
proximidad. Categoría, Reto. Equipo, un histórico del fútbol femenino. Es una
oportunidad muy ilusionante.
En cuanto a la gestación del
proyecto, cuando llegamos ya había avanzados varios nombres, varias jugadoras
apalabradas. Una vez que llegamos recibimos confianza y garantías: “tú aquí
decides, estos son los nombres. En todo lo que tiene que salir tú también
decides”. Hubo mucha consonancia desde el principio. Contactamos continuamente,
vía telefónica, con el presidente, resto del cuerpo técnico, con Alex, el
preparador físico, trabajando en las primeras sesiones, llamadas con
jugadoras...
Montaje con el que se anunciaba la incorporación de Crespo | Racing Féminas
P. Se le ha permitido, por tanto,
trabajar según sus métodos. Se confía en su figura para todos los movimientos…
R. Sí. De hecho, es la suerte que
tienes. Quizás otras temporadas no te parabas mucho a ver por qué se firmaba a
una jugadora o a otra. Aquí sí es verdad que, y tengo que estar muy agradecido
por ello, se ha trabajado por que todos los nombres que pusimos encima de la
mesa estuvieran en el Racing. No todos se han conseguido. Se ha tratado con
jugadoras muy, muy importantes, algunas incluso que van a estar en Primera
Iberdrola. A parte de estos casos, cualquier fichaje que hayamos propuesto se
ha cerrado muy rápido. También es de agradecer a las jugadoras por su
predisposición. Todos estos factores han permitido construir un proyecto
conformado por jugadoras jóvenes y otras más experimentadas, con trayectoria en
Primera Iberdrola y varios ascensos a la máxima categoría en sus espaldas.
P. ¿Opta por mantener el bloque o
rehacer según su voluntad y necesidades? ¿La clave está en hallar el punto de
equilibrio?
R. Son muchos años y de ahí puedo poner el ejemplo. Nosotros, como entrenadores, nos tenemos que adaptar a lo que hay. Puedes tener una idea de juego y que esta no encaje con las particularidades de la entidad. Sí es verdad que, en esta situación, por ejemplo, podemos decir: “oye, queremos meter a Yuki porque nos da esto. Queremos firmar a Ángeles porque nos ofrece esto otro”. Necesitábamos ahora un perfil de jugadora que pudiera desenvolverse en varias posiciones y ahí encajaba Titay. Jugamos con esa ventaja, en el sentido de que ahora sí puedes, más o menos, buscar jugadoras que encajen en el fútbol que desees desarrollar.
P. Es complicado definirse a uno mismo, pero, reflexionando ¿qué puede aportar usted al proyecto del
Racing?
R. (Risas) La verdad, como
comentas, no me gusta hablar de mí. Soy una persona bastante seria, lo cual no
hace que el proceso de formación de jugadoras, o de entrenamiento, sea más o
menos cómodo o ameno. Debemos tomarnos la categoría con la profesionalidad que
merece. Entonces, ahí me veo como lo que soy, como una persona seria,
trabajadora, muy, muy exigente con lo que hago. Si me va bien, quiero más. Si
me va mal, trato de no enrocarme, cambiar, tratar de seguir avanzando. Soy una
persona a la que le gusta mucho relacionarse y juntarse con su equipo de
trabajo, dialogar con ello, tanto con Andrea como con los otros tres
asistentes.
Al final, la suma de todas estas
partes es lo que puede hacer que el equipo vaya bien.
P. Carla Andrés, Henar Muiña,
Ángeles del Álamo, Lucía Alba, Titay, Gema, Yuki, Paloma Fernández, Marina
Martín… Hay un denominador común en todas ellas: grupo norte. ¿Es su objetivo
principal a la hora de confeccionar la plantilla?
R. Sí, yo creo que fue lo
primero. Por poner un ejemplo, desde el momento en que había movimiento en la
portería, nos sentamos para pensar qué portera del grupo norte podríamos traer.
Si ya la pasada temporada la Reto Norte fue una competición de sprint, este año, con la
reestructuración, todavía es más complicada. Tres de los cuatro descensos de
Primera Iberdrola se han encuadrado en nuestro grupo. Deportivo Abanca, DUX Logroño y Espanyol
están construyendo equipazos, después están los siempre regulares Osasuna, Oviedo…
Entonces, en estas circunstancias, ¿a qué tienes que ir? Pues a jugadoras que
tengan muchos minutos disputados en la zona, que sepan lo que se van a
encontrar cuando vayan a Pamplona o a Barcelona. Por ahí nos hemos movido.
Henar y Gema son jóvenes y llevan toda la vida jugando en el Oviedo, Carla suma
tres años jugando en la categoría, Marina Martín, que incluso parece veterana
ya, también es joven y ya ha estado en primera con el Tacón. Hemos tratado de
cerrar gente que sepa lo que es la zona norte.
P. Junto a usted se vienen del
Real Oviedo Gema Ginés, Titay Calvo, Yuki Togawa y Laura Camino. Todas piezas
clave del cuadro carbayón. ¿Sabía que debían estar en su proyecto?
R. Dos de ellas ya estaban en el
club antes de que llegara yo y las otras dos, Titay y Yuki, estaban en el
mercado, no habían recibido oferta de renovación del Real Oviedo. Así que
tiramos por ese camino.
Al final, será la tercera
temporada que Gema esté conmigo. Cuatro años compartiendo club y tres en la
misma plantilla. Ya sabe cómo funciono, Yuki sabe cómo funciono, Titay sabe
cómo funciono… Además, si le sumas que el resto de jugadoras ya las conocen, ya
saben quién llega, pues es una victoria.
Pero sí, que esas jugadoras
vengan del Real Oviedo como yo, como te digo, se basa en que estaban en el
mercado, hicieron un grandísimo año e igual que tuvieron la nuestra tuvieron
otras ofertas. Así que estoy agradecido también porque apostaran por nosotros.
P. Parece que, en ese primer día
en el vestuario, aunque todo equipo necesite una pretemporada para afianzar
lazos, será sencillo trabajar como equipo…
R. Totalmente. La pasada
temporada tuvo que ser complicada para todos los equipos: no disponer de un
vestuario para cambiarte y llegar directamente al campo preparada para jugar
hace que los procesos cambien.
Puede suceder que lleguemos el
primer día al vestuario, una jugadora mire a su derecha y diga: “uy, te
conozco”, mire a la izquierda y piense: “uy, a ti también te conozco”. Son
ventajas y un refuerzo para dar pasos a un mayor ritmo. Son detalles que ayudan
a que una jugadora se integre más rápido en el club.
P. Y, en cuanto a las bajas, ¿alguna en
especial que le hubiera gustado mantener?
R. Cuantas más jugadoras de la
casa, mejor. El Racing tiene que tener esa identidad de jugadoras de Santander.
Se le ha ofrecido renovación a jugadoras de la casa que no han continuado por
diferentes motivos. Unas se han marchado a estudiar a Estados Unidos, como el
caso de Nerea, otras que querías que estuvieran y no continúan, como Lara… Al
final son futbolistas que deciden, por estudios o fútbol, probar suerte fuera.
En casa sigue habiendo gente
joven muy importante, jugadoras internacionales por España, a las que hay que
dejarles hueco. Futbolistas muy jóvenes como Nayara o Naara, o incluso Laura
Viñas, que a sus 17 años va a jugar con nosotros.
P. ¿Cómo valora y qué cree que
aportarán aquellas que se quedan en el bloque? Empezando por una de las
jugadoras más reconocidas de toda la categoría, Pinxis. ¿Cuánto suma tener a
una jugadora así?
R. Pinxis es una futbolista a la
que no conocía personalmente. El año pasado nos enfrentamos tres veces, ya que
en pretemporada jugamos un amistoso, y recuerdo cuando fuimos a jugar a
Santander, que ellas iban líderes. Ganamos 0-1 y, al terminar el partido, le di
la mano diciéndole que era un privilegio encontrarme a jugadoras como ella en
un terreno de juego porque lo primero que hizo fue felicitar a todas y cada una
de mis jugadoras y darnos personalmente la enhorabuena. Eso dice mucho de una
capitana: primero te felicito y me guardo mi fastidio para el vestuario. Me
parece importantísimo que jugadoras emblemáticas todavía tengan ilusión por
seguir jugando y creciendo. Se ponen a tu servicio y estos casos sirven para
explicar por qué un equipo debe tener gente de la casa.
Irene, igual. Ayuda mucho en el
equipo. Además, le operaron antes de ayer de apendicitis y me gustaría
aprovechar este espacio para mandarle un saludo. Son capitanas y están
pendientes de todo, de que las jugadoras nuevas estén tranquilas, se acomoden a
los pisos, a la ciudad, al equipo. A parte, a nivel futbolístico son jugadoras
excepcionales.
En fin, es un espejo donde hay
que mirarse y todos los equipos deberían tener una Pinxis.
P. ¿Cuál es su planteamiento de
juego para el Racing? El año pasado se pudo ver a un equipo atrevido, que
trataba al balón con mimo, optando por el juego de posesión y en bloque alto.
¿Será un proyecto continuista?
R. Nos gusta ser exigentes en el
campo. Sabes que puedes tener una idea de juego y que el rival te condicione,
pero nos gusta ser exigentes y que las jugadoras sepan amoldarse a todos los
movimientos que tiene el partido. La base principal es la solidaridad. Me gusta
que se busque la presión alta, que exista esa solidaridad en el trabajo
defensivo y, a partir de ahí, trabajar mucho con el balón. Y atacar. Podemos
ser muy pacientes con el balón y a la vez movernos rápidamente con el esférico.
Hemos tratado de buscar jugadoras que muevan la posesión bien en campo rival,
que empujen atrás también, poder salir a las espaldas y buscar alternativas en
el juego.
P. Por último, una predicción, si
así se puede considerar… ¿Qué espera de la próxima temporada, tan poco habitual,
con tantos rivales de nivel en el grupo y más descensos que nunca?
R. El año pasado me cansé de
decirlo, que iba a ser una liga de sprint,
que cada jornada marcaría el devenir. Este año será igual. Veo una liga
tremendamente igualada, en todos los sentidos. Tanto los ascendidos, como
descendidos, como los que continúan en Reto se están reforzando francamente
bien. Todos sabemos que va a ser un año muy complicado. Así que solo nos queda
pelear y trabajar. Siempre digo que las notas llegan en mayo y hay que llegar a
esas cuatro últimas jornadas bien posicionado. Sabemos que nuestro objetivo es
mantener la categoría, como el resto de los 16 equipos, y a partir todo se
consigue trabajando. A eso vamos a Santander, a trabajar, trabajar y trabajar.