El fútbol femenino de selecciones mira hacia 2025. Ese año se llevará a cabo la Eurocopa, que, después del Mundial, se ha consolidado como el segundo gran torneo internacional en el ámbito del balompié femenino.
El fútbol femenino de selecciones apunta a 2025. En ese año se celebrará la Eurocopa que, tras el Mundial, se ha consolidado como el segundo gran torneo internacional del planeta balompédico en clave de las mujeres. Suiza es el país anfitrión y abre la puerta a un total de 16 selecciones que pelearán por coronarse como las nuevas reinas del continente. Los últimos años han sido de cambios drásticos entre las selecciones UEFA y esta edición se presenta como una de las más competitivas e igualadas de la historia del campeonato, que además supera los 40 años de vida.
La ampliación a dicho número de participantes, materializada en 2017, ha sido determinante para que una cita de estas características adquiera la importancia que merece. Todos los países, salvo el anfitrión Suiza, tienen que clasificarse para el torneo a través de la fase de clasificación. A un año de que eche a rodar el balón en territorio heleno, algunos equipos ya han asegurado su presencia.
Entre ellos está España, actual campeona del mundo y uno de los favoritos para levantar la copa. El
fútbol español de clubes vive un gran momento, con un creciente interes mundial, y esto se traduce en una notable mejoría para el equipo nacional.
El formato de la Eurocopa se organiza en cuatro grupos con cuatro equipos en cada uno de ellos. Los dos primeros clasificados entran en las eliminatorias, a partir de cuartos de final. La final se disputa el 27 de julio de 2025 en el
estadio St. Jakob-Park de Basilea. Las
otras sedes del torneo son Zurich, Berna, Ginebra, St. Gallen, Lucerna, Sion y Thun. Las principales ciudades suizas están aquí representadas, por lo que para los aficionados al fútbol es una gran oportunidades para ver de cerca a las mejores selecciones del fútbol femenino a la vez que hacen turismo de calidad en una de las zonas más bonitas del continente.
Las favoritas
El fútbol femenino en Europa está ahora más igualado que nunca. El nivel crece entre selecciones tradicionalmente más flojas, como es el caso de la española, y se iguala con otras que siempre han copado el ranking de favoritismo. Si bien todavía queda un año para el inicio de la competición, los resultados del pasado Mundial y la situación de las selecciones en la fase de clasificación permite hacer un balance bastante aproximado sobre las posibilidades de cada equipo.
España es, de hecho, la favorita para ganar la Eurocopa 2025. A la espera de confirmación por parte de las casas de
apuestas online, el equipo que ahora dirige Montse Tomé no ha encontrado rival durante los últimos dos años. La victoria en el Mundial de Australia 2023, el primer título en la historia de la Federación Española en el fútbol femenino, ha confirmado a un gran grupo de jugadoras como las mejores del momento. Unos meses después, el combinado nacional ganó con autoridad en la Nations League, lo que refuerza más si cabe su condición de favorito para la próxima edición continental.
El grupo de aspirantes a plantar cara a las españolas es amplio. Las subcampeonas del mundo, Inglaterra, también están entre las candidatas. El combinado británico es el actual campeón de Europa, tras vencer en la edición de 2022, celebrada en su país, y cuenta con un grupo de jugadoras de alto nivel. Suecia, semifinalista en el citado Mundial, también está entre el elenco de aspirantes a llevarse el trofeo a casa. Alemania, clasificada con bastante antelación, Francia y Países Bajos completan un cupo que, dada la igualdad en el fútbol femenino actual, no está cerrado.
Historia
La trayectoria de la Eurocopa femenina es muy peculiar. El torneo solo en una ocasión ha conocido a un ganador que no sea el anfitrión o que no sea Alemania. Esta afirmación merece una explicación. Los últimos dos torneos fueron ganados por
Inglaterra y Países Bajos, que actuaban como anfitriones en 2022 y 2017 respectivamente. En las seis ediciones anteriores, el ganador fue Alemania. Las alemanas impusieron durante más de dos décadas su
absoluto dominio, pues entre 1989 y 2013 ganaron ocho de las nueve ediciones. Son, y lo serán durante al menos tres décadas, líderes en el palmarés.
En la primera edición, disputada en 1984, la ganadora fue Suecia, en un torneo que no tuvo una sede fija. Tres años después, Noruega ganó siendo anfitriona. Y es en el año 1993 cuando no se cumple una de las condiciones apuntadas en el inicio de este apartado: Noruega ganó en Italia ante, precisamente, la selección italiana. Las noruegas son las que más finales han perdido, un total de cinco. Además, Suecia, Italia e Inglaterra suman dos subcampeonatos, mientras que Dinamarca y Alemania han perdido una final.
El lado exitoso de la historia ha estado siempre alejado de la Selección Española, una condición que se acabó en 2023 y que también podría cambiar en 2025, en este caso con el Campeonato de Europa de naciones. Su rendimiento actual bien merece una buena dosis de confianza.