La aventura islandesa de Alexandra Taberner y Marta Sáez

No es necesario ser un profeta para darse cuenta que el calendario de liga en los países nórdicos es completamente inverso al de la mayoría de países europeos. Entre septiembre y mayo se reparten las jornadas en España, mientras que entre mayo y septiembre transcurren las disputas al norte de Europa. El frío y las bajas temperaturas son el principal motivo de este calendario. 

 Y ya que en verano hay fútbol, las jugadoras del CF Pardinyes Alexandra Taberner y Marta Sáez, de Primera Nacional grupo 3, decidieron hace dos veranos no desaprovechar la ocasión y vivir una experiencia única a 3.000 kilómetros de distancia de su Lleida natal. 

¿Cómo dos jugadoras catalanas llegan a vivir el sueño de jugar en la mismísima Islandia? 

“Hace dos años estuvimos en Islandia porque nuestro entrenador era catalán y nos vio en redes sociales. Nos propuso si queríamos jugar en Islandia. Y dijimos que sí. Este año, ha sido a través de nuestro representante islandés. Se nos ofreció volver a jugar en la misma categoría, con un contrato semiprofesional”, nos desvela Alexandra Taberner, máxima goleadora del Pardinyes esta temporada, con 16 tantos. “La propuesta nos llegó vía Facebook, que habían visto partidos nuestros y nos ofrecían también trabajo. Era una propuesta muy valorada, futbolísticamente. Al principio te llama la atención porque contactan contigo para hacerte una oferta en otro país, muy lejano y se duda. Luego hablamos con él por teléfono y no nos lo pensamos. La familia siempre quiere lo mejor para nosotras y nos animaron a aceptar la propuesta”, añade Taberner. 

A diferencia de la experiencia de 2019, la aventura de este verano es diferente. En otro club y en otra ciudad. A 9 horas de distancia en coche de Reikiavik, la capital. “Este año estamos en otro equipo y en otra ciudad. Todo completamente diferente. De hecho, a nosotras no nos echaba para atrás sino todo lo contrario. La propuesta económica era mejor y el proyecto deportivo más ambicioso”. 

Ni Alexandra ni Marta hablan islandés pero con el inglés es suficiente para comunicarse con el cuerpo técnico, sus compañeras y poder hacer vida en Islandia. “La recepción fue espectacular. Nos tenían preparada toda la ropa cuando llegamos, manutención, nos han dado un coche...estamos viviendo un sueño. En España esto ocurre en Primera División, como mucho”, exponen sorprendidas, a la vez que agradecidas. El equipo en esta segunda etapa, que compite en Segunda División, es la unión de tres clubs diferentes, el Fjardabyggd, el Leiknir y el Höttur. 

“Las aficiones y entretenimientos en nuestra localidad no son tan variados como podamos tener en España. No hay cines ni teatros y para ellos ir al fútbol es uno de sus pasatiempos. Además la entrada es de pago y el campo es cubierto. Entrenamos cada día y tenemos contrato hasta el 15 de septiembre”, explican. 

Las jugadoras del Pardinyes son las únicas representantes españolas en el equipo, además de tres jugadoras americanas. “Hay compañeras que se han interesado por venir pero también es verdad que te tiene que gustar mucho el nivel de ser futbolista profesional, ya que renuncias al verano y que todo lo que se puede hacer durante los meses de junio, julio y agosto en España, en Islandia no se puede hacer. El ocio nocturno se debe limitar y eso cierra las puertas a muchas personas”. 

“Somos unas privilegiadas por vivir esta experiencia. Estamos viviendo una experencia parecida a la que quizá se viviera en Primera División de España aunque el nivel es parecido al de Primera Nacional en cuanto a aspecto técnico pero físicamente sí que es superior. Cuando volvamos a jugar al Pardinyes notaremos el ritmo, ya que allí han hecho la pretemporada y nosotras venimos de ritmo de competición”. 

Una experiencia única e irrepetible en la que se vive un estilo de vida de futbolista profesional lejos de casa pero con un retorno deportivo y personal incalculable. Molta sort, Alexandra i Marta! ¡Nos reencontraremos en Futboleras la próxima temporada!