El técnico español junto a su equipo INAC Kobe Leonnesa son líderes de la WE League de japón
Jordi Ferrón (Badalona, 1978) es un entrenador entregado en cada proyecto deportivo que se le presenta y se ha implicado hasta el final en todos los retos que se le han presentado y ha aceptado involucrase. Técnico inconformista, autocrítico y en constante crecimiento personal y profesional.
Tras pisar Primera División por última vez en el banquillo de la SD Eibar, el técnico catalán ha iniciado en este pasado mes de octubre su primer reto lejos de su Badalona natal. ¡Y tan lejos! Exactamente a 10.300 kilómetros de distancia. Un viaje con hasta ocho horas de huso horario de diferencia entre Badalona y Kobe, su nuevo hogar esta temporada.
A las 9 de la mañana en España (5 de la tarde en Kobe) charlamos Jordi Ferrón para conocer de qué manera le surgió la posibilidad de poder entrenar al Kobe Leonnesa, único equipo entrenador por un técnico no nativo.
Primera experiencia de Jordi Ferrón en Japón. Seguramente cuando empezó a entrenar en la UE Cabrera, no se hubiera imaginado jamás que entrenaría a 10.000 quilómetros de distancia de casa.
Ni siquiera me hubiera creído todo lo que he conseguido y vivido en el fútbol femenino. Yo empecé a entrenar a fútbol gracias a mi hija, no por convicción. Después, gracias a ello, me ha hecho vivir situaciones muy bonitas, como esta en Japón, entrenar en Primera División o incluso ser comentarista en partidos de televisión o radio.
¿De qué manera surgió la oportunidad de entrenar en la Primera División de Japón?
Tenía ganas de entrenar en el extranjero y vivir la experiencia. Estaba buscando algún equipo o club que me diera esa oportunidad y me presentaron la posibilidad de Japón. En junio hice una tecnificación en Japón en una escuela de secundaria. A partir de ahí me gustó, me ofrecieron a diferentes clubs y he tenido la suerte de poder firmar por uno de los clubs más importantes del país como es el Kobe Leonessa.
¿Qué referencia tenía del fútbol femenino japonés?
El contacto y conocimiento que tenía del fútbol aquí lo he tenido a través de jugadoras que he entrenador en Eibar o Espanyol. Es un perfil de jugadoras que me gustaba mucho. Muy disciplinadas, trabajadoras, con muchas ganas de trabajar, y justamente me he encontrado eso aquí. Un grupo de jugadoras que tienen muchas ganas de aprender y muy disciplinadas en todos los ámbitos. Hacemos entrenamientos de dos horas, pero cuando acabamos se quedan más tiempo para perfeccionar aspectos a nivel individual. Es una pasada la capacidad de sacrificio que tienen.
¿Qué tipo de trato tiene el fútbol femenino en Japón?
Está muy bien cuidado en todos los ámbitos. Los partidos los disputados en estadios de Primera División, con capacidad para 30.000, 40.000 y 50.000 aficionados. Se intenta cuidar mucho a la jugadora. Es una liga que recomendaría mucho a jugadoras españolas que quieran probar esta experiencia porque es una liga que valora a la mujer. Ahora en la liga hay dos jugadoras españolas (Paula Guerrero y Carla Bautista). Es un lugar muy bonito para jugar, pero está muy, muy lejos.
En cambio, a la inversa, sí está en auge la emigración de jugadoras japonesas a España. ¿Sabe el motivo?
La mayoría de jugadoras japonesas quieren venir a Europa a jugar y quieren venir a España. El fútbol español y la marca Barça femenina tira muchísimo más allá de España. El Mundial también ha aumentado el interés y ven el fútbol español como una evolución interesante. Ellas quieren seguir creciendo fuera de Japón para conocer otro fútbol. Aprender y evolucionar está en su ADN. En Japón se cuida mucho el fútbol femenino y la verdad que es una lástima que quieran irse fuera cuando aquí las tratan bien. Hay futuro en Japón.
¿De qué manera se comunica con el equipo?
Por suerte tengo un traductor, quien ya tiene experiencia en este tipo de servicios en otros clubs y equipos profesionales masculinos. El inglés aquí no se habla casi nada.
No tengo ninguna queja y tengo la suerte que su tono es muy bueno y expresa lo que quiero que sientan las jugadoras. La parte cultural sí que quizá al principio costó. Los japoneses tienen una forma de ser que hace que el entrenador se ubique en una jerarquía superior, pero a poco a poco hemos conseguido que las jugadoras se comuniquen más, transmitan de qué manera se sienten. Estoy muy contento con las jugadoras.
¿Se ha revalorizado la figura del entrenador tras el Mundial?
Absolutamente. Esta situación ya se dio hace 13 años cuando los chicos ganaron el Mundial masculino y ahora se está repitiendo el mismo contexto, pero con los chicos. El fútbol femenino en España es muy potente y ahora se trata de exportarlo. La manera de jugar gusta mucho en más allá del país.
¿Ha aprovechado Jordi Ferrón para hacer turismo?
Es tan diferente a nuestro mundo. A mí me gusta mucho la cultura japonesa y es un lugar en el que no me importaría vivir. La educación, el respeto, el civismo…son aspectos que debemos aprender mucho de los japoneses. No hay prácticamente robos, puedes dejar una bicicleta sin atar. Quizá incluso hay un exceso de respeto.
¿Se mantiene al día de susexequipos y fútbol en España?
¡Sí! Estoy al día del fútbol femenino en España y también sigo a mis exequipos, entre ellos el Seagull. El huso horario no acompaña, pero estoy muy pendiente sino a través de Twitter.