El equipo de Pedro Arboleya, líder en solitario del grupo I de Tercera federacion, demuestra ser el conjunto más en forma de la competición
La apuesta del Real Avilés Industrial por el fútbol femenino va más allá de haber incorporado nuevos conjuntos a su estructura deportiva. Es un proyecto que se inició hace tres temporadas tras llegar a un acuerdo con el Versalles CF, cuando el equipo avilés ascendió a Primera Nacional y se inició un idilio que aún perdura.
Son líderes en solitario tras 14 jornadas, no conocen la derrota y suman 13 victorias y un empate, demostrando que son el conjunto más en forma de la Tercera RFEF con índice de efectividad del 95%. Sólo se le han escapado 2 puntos y fue en la jornada 7 con la UD Mos, jugando en casa.
La nueva propiedad del club asturiano apostó seriamente por el fútbol femenino y por el binomio formado por Ángel González (director deportivo) y
Pedro Arboleya (técnico del primer equipo). La dilatada trayectoria en el fútbol regional asturiano y su conocimiento y bagaje en la antigua Primera Nacional fue una valía que se valoró en Avilés y que a día de hoy está dando sus frutos y resultados, tanto en el campo como en la clasificación.
El
Real Avilés son líderes en solitario del grupo I de Tercera RFEF, con 13 victorias en 14 jornadas y un único empate es el balance avilés (40 puntos), con un margen de 8 puntos respecto al segundo clasificado, el Deportivo Abanca B (32).
Junto al técnico blanquiazul conocemos la temporada de matrícula de honor del equipo y los objetivos que se plantean a corto plazo en el club.
Primero de todo enhorabuena, Pedro, por el gran año que se está consiguiendo en Avilés. Se podía prever una buena temporada pero, ¿también que fuera tan y tan positiva?
Es una gran satisfacción en el Club. Es la tercera temporada de la sección femenina en el Avilés tras asumir la dirección del Versalles, tras ascender el equipo a Primera Nacional. La pasada campaña se consolidó la integración de forma definitiva en el club y este año competimos a todos los efectos bajo el paraguas de Real Avilés Industrial. Ahora se trata de llevar el proyecto deportivo lo más lejos posible.
La palabra ascenso ya se pronunciaba en verano, pero un contexto es pronunciarlo y otro hacerlo. De momento, se está demostrando con mimbres firmes.
No es una cuestión de exigencia o ilusión sino también de responsabilidad. Se tiene que ser conscientes de los recursos que se pone a tu disposición para llegar a esas últimas cuatro o cinco jornadas de pelear por el ascenso. Ese era el objetivo que nos planteamos a principio de temporada: llegar al último mes de competición con opciones de ascenso.
¿El Real Avilés apuesta por un entrenador conocedor de la categoría hace tres temporadas y Pedro por un club con ambición y futuro?
Ellos apuestan en primer lugar por Ángel como director deportivo de la sección, una persona que conozco muy bien de nuestro paso por el Real Oviedo Femenino y desde el primer momento me transmite que empiece este proyecto con él. Mantenemos una muy buena relación y éramos conscientes que se trataba de asentarse con paciencia y calma en un nuevo proyecto. Ahora estamos en un momento de plena satisfacción.
Primer equipo masculino y primer equipo femenino, de la mano hacia la consolidación en Segunda RFEF.
Es un proceso de equiparar. El club apostó por el femenino a partir de un primer equipo y esta temporada ya están consolidadas todas las categorías, con hasta dos filiales. El tratamiento del femenino está al mismo nivel que el masculino, no está al margen. La mayor diferencia es de salarios, pero la estructura de entrenamientos es la misma, adaptando los horarios.
En Avilés se está trabajando en la construcción de una ciudad deportiva para que se pueda proyectar en este año 2024.
Superar la tercera posición de la pasada campaña en Tercera RFEF
La pasada temporada fue muy buen, aunque nos lastraron las derrotas en las primeras jornadas. Mantener la estructura de la pasada temporada era un factor clave y hacerlo incluso reforzando el talento asturiano. Se han renovado hasta 14 jugadoras y este año se han fichado jugadoras que mejoran la plantilla que teníamos y se adaptan a lo que el cuerpo técnico les requiere. Estamos manteniendo un bloque que es el mismo del año pasado, y muy parecido al de hace dos años. Mantener esa confianza a veces da resultados.
A nivel mental es un equipo cada vez más fuerte y se ha confeccionado un grupo de 20-21 jugadoras que responden al rendimiento y de muy buen nivel, a la vez que parecido.
¿Invita la situación del equipo a poder planificar con mayor margen la próxima temporada?
Tenemos la experiencia de las dos anteriores temporadas en este grupo. Hace dos años le ocurrió a Interrías (líder primera vuelta) y el año pasado le pasó a Depor B (líder primera vuelta). Esas dos situaciones nos obligan a ir semana a semana y fijarnos en lo que hacemos nosotras. Buscamos mejorar y competir siempre mejor que la semana anterior.
¿Se imagina tres equipos asturianos en Segunda RFEF? Debe ser un orgullo
Sí, y sobretodo el orgullo de ver al Real Avilés competir junto a Oviedo y Sporting. Es un proyecto con tres temporadas de vida y luchar junto a dos clubs y estructuras muy importantes y que acumulan bien el fútbol femenino desde hace años.
Apoyo creciente desde el club, pero también desde la grada
Obtener buenos resultados invita a la gente a engancharse. El apoyo desde dentro del club ya lo tenemos, pero a hora también se suma un mayor número de aficionados. El club trabaja cada semana para no hacer coincidir los horarios de los dos primeros equipos con el fin de facilitar el acceso de la mayor cantidad de gente posible.