El fútbol como vehículo de cambio

El Disport F.C. es un equipo de Pallejà (Barcelona) de fútbol adaptado. Un equipo que se creó debido a la falta de alternativas de ocio y deporte con la que se encontraban muchas familias con miembros con parálisis cerebral. 
 
Si buscamos la descripción de deporte, vemos que implica una actividad física. Sin embargo, las familias se encontraron con que sus hijos con esta discapacidad no tenían una alternativa de ocio para hacer deporte. Nuestra discapacidad no tiene por qué llevar una discapacidad intelectual. Tenemos una limitación motora pero capacidades intelectuales como todo el mundo. Al encontrarse con esta carencia de alternativas para la gente con parálisis cerebral, las familias decidieron fundar el Disport (DIS – discapacidad + Sport). Nos comenta David Trepat, presidente y jugador del Disport F.C.
Desde su creación, el club ha fomentado la inclusión social y el deporte como terapia. Para las personas con parálisis cerebral es necesario el movimiento y el sedentarismo es algo que no beneficia, por lo que todo tipo de ejercicio físico que esté a su alcance es positivo. Parar durante un periodo largo de tiempo significa empeoramiento. 
 
Aun así, hemos ido evolucionando en el fomento de otros valores y lo que nos gusta promover es la normalización del deporte adaptado. Muchas veces nos encontramos con las típicas expresiones de “pobrecitos”, “qué bien lo hacen con lo mal que están”. Estos tipos de comentarios son algo que no nos sienta bien. Lo que queremos es normalizar que nosotros también entrenamos a alto nivel, entrenamos dos días a la semana, dos horas cada día y que competimos también a un nivel exigente. Queremos que la gente sepa que existe el fútbol adaptado para la gente con daño cerebral. Es otro tipo de fútbol, claro que andamos diferente pero el esfuerzo físico y la preparación para jugar y competir están y no por esa diferencia debe de ser menos vistoso. 
 
No obstante, este equipo revelación, gran impulsor de la inclusión en el deporte va más allá y lucha por uno de los valores que más en juicio está hoy en día dentro del mundo del fútbol.

Somos un club de fútbol de personas con daño cerebral que se formó en 2004 pero no es hasta 2010 cuando una chica se une al club. A día de hoy contamos con tres chicas en el equipo. 
Esta competición nos permite jugar con equipos mixtos, es decir, no se crea esa división en secciones por género. Uno de los problemas es que este fútbol de personas con discapacidad tiene muy poca visibilidad, entonces cuesta mucho que vengan tanto chicos como chicas. Es muy difícil juntar a cinco chicas en un solo equipo. La poca difusión y ese estereotipo antiguo de que las chicas no juegan a fútbol les hace más difícil dar el paso.
La Federación Catalana de Paralíticos Cerebrales ha sido la que ha dado el gran impulso al fútbol femenino, creando la Selección Catalana de Fútbol Femenino, siendo así ejemplo para la posterior creación de la Selección Española de Fútbol Femenino. 
 
Pero, vayamos por partes. Antes de nada, hay que tener en cuenta varios puntos clave para entender que esta modalidad de fútbol no es tan diferente. Quizás tengan problemas motores pero ninguno -o muy leve- intelectual y/o cognitivo. 
 
Nuestra discapacidad puede o no llevar una discapacidad intelectual. Y si la hay es muy leve y esa gente prefiere jugar con otra que tampoco tenga una discapacidad intelectual muy grave, lo que es mejor para integrarse, sociabilizar y hacer amigos. 
 
A partir de numerosos estudios, (González, 2014) se demuestran los grandes beneficios que la actividad física y el deporte, bien orientados, pueden aportar al organismo. Por otra parte, además de contribuir a la salud, aporta una serie de valores personales y sociales que afectarán de manera positiva a su bienestar psicológico y a una mejora de las relaciones sociales. Añaden otros especialistas (Goldberg, Gitta y Puddephatt, 1995) que estos beneficios son mayores en personas con discapacidad, debido a que suelen estar rodeados de un excesivo proteccionismo. 
 
Es terapia en dos vertientes. Por un lado,  la social, los chavales que llegan –y yo mismo cuando empecé- nos encontramos con gente, niños y niñas que tienen los mismos problemas que nosotros. Por tanto, poder compartir esas dificultades que encuentras en la vida cotidiana y en el colegio con esta gente es favorecedor. Por otro lado, a nivel físico, el hecho de que nos estemos moviendo y haciendo deporte hace que aumentemos en calidad de vida. Tanto a nivel mental como a nivel físico y para que nuestras estructuras óseas y musculares no se vean tan afectadas por nuestra discapacidad. 
También para los padres. Al principio, son momentos duros, ver que a tu hijo le cuesta y que no está dentro de un grupo… tener estas alternativas, conocer a esta gente y poder compartirlo es algo positivo  y hasta necesario.  
 
El deporte inclusivo es aquella actividad física que permite la práctica conjunta de personas con y sin discapacidad, ajustándose a las posibilidades de los practicantes y manteniendo el objetivo de la especialidad deportiva de que se trate. Supone un ajuste o adaptación en las reglas y el material utilizado con el fin de fomentar la participación activa y efectiva de todos los participantes. Más allá, el deporte inclusivo es una actitud hacia la práctica deportiva a todos los niveles y, gracias a la investigación aplicada, se conocen sus beneficios en materia de sensibilización, conocimiento y respeto a la diferencia, así como en el fomento de hábitos de vida saludable a través de estilos de vida activos (Pérez-Tejero, 2014).
 

Hace un par de años, el COI decidió suprimir del Programa Paralímpico el fútbol adaptado. El motivo estaba claro: falta de visibilidad, difusión y participación. Sin embargo, otro de los motivos que se dejaron ver cuando se expuso esta decisión era la poca participación de mujeres y la falta de un programa de fútbol adaptado para ellas. 
 
Desde la Federación Internacional se instó a los países que se empezara a desarrollar la sección femenina.–nos cuenta Angels Sola, Directora Técnica de la Federación Catalana de Deporte Adaptado (FECPC).- En la Federación catalana teníamos equipos de chicos en los que también jugaban chicas. De todas formas, hicimos una campaña para llamar a más jugadoras y al final entre las chicas que ya teníamos más los nuevos fichajes, conseguimos hacer una primera convocatoria exclusiva de chicas. Se creó de esta forma la selección catalana y las convocábamos para entrenar juntas.
 
Y gracias a ese impulso por parte de la Federación Catalana (FECPC) ahora, es la Federación Española (FEDPC) la que toma la iniciativa convocando por primera vez a las jugadoras para el próximo fin de semana del 9 de octubre.
 
Les gustaría incluir a más gente del resto de España pero no es fácil en chicas. Es difícil encontrar a jugadoras. Es verdad que la cosa va cambiando y cada vez vemos más equipos femeninos, sin embargo, el fútbol es muy masculino. Entonces, las chicas antes no tenían este hueco y si a esto le añadimos que tienen parálisis cerebral no es algo que resulte muy fácil. A las chicas les cuesta, tiene que ser una situación en la que la familia sea muy futbolera y a ella también le interese pero de primeras, convencer a una chica con parálisis cerebral a jugar a fútbol no es fácil.
 
Esto funciona al revés, buscamos a las chicas para ofrecerles jugar a fútbol, no es la jugadora la que se ofrece al club. De la otra forma, ni les llega la información de que existe esa posibilidad o ni se la han planteado.

Desde la Federación Española de Deportes de Personas con Parálisis Cerebral y Daño Cerebral Adquirido (FEDPC) se intenta promover el fútbol adaptado en todas las comunidades, sin embargo, algo que ya sucede con el masculino y se incrementa en el caso de las féminas es que se aportan muy pocos equipos. La Federación española depende de las territoriales, si éstas no se ponen las pilas, la labor de buscar jugadoras dentro de cada comunidad por parte de la federación nacional sería muy complicado porque no disponen ni de contactos ni de medios para llegar a ellas. Por tanto, es necesaria la promoción de este deporte dentro de cada comunidad para poder impulsarlo y darle la publicidad y visibilidad necesarias.
 
Cuando nosotros hicimos el impulso fue relevante el papel de la Federación Catalana de Fútbol, gracias a que estuvieron detrás de nosotros, apoyándonos y convocando a prensa y demás pudimos dar ese gran salto. El apoyo de  esta Federación es algo que nos gusta remarcar. 
 
La vuelta al Programa Paralímpico resulta una tarea laboriosa ya que una vez que sale un deporte de dicho Programa su reentrada resulta complicada. Ángels sentencia al final, si por ejemplo, un deporte se fomenta en cualquier país asiático ya tienes mucha gente practicando ese deporte, sin embargo, este es uno que no termina de explotar y ha acabado por salir del Programa. 
 
Pero, a pesar de que pueden aparecer impedimentos en el camino, pueden tropezarse más y puede resultarles un peldaño más difícil que a los demás, el fútbol siempre será fútbol en cualquier rincón del planeta y para cualquier persona que quiera practicarlo.
 

Empecé en Disport hace unos siete años aproximadamente. Siempre había querido jugar pero anteriormente me había metido en otros deportes adaptados y cuando me enteré que existía este no lo dudé. La primera etapa estuve poco, solamente una temporada y media porque empecé a estudiar un grado superior y a trabajar y me costaba mucho compaginarlo con el fútbol. Lo abandoné durante esos años y hace tres años, cuando la Federación impulsó su proyecto de fútbol femenino, decidí volver. 
No me lo creía, llamé con muchos nervios a la Federación y les dije ‘¡por fin habéis hecho esto!’ Yo había competido durante mucho tiempo con la Federación de natación adaptada, también, pero cuando me enteré del proyecto de fútbol femenino. Que a nivel catalán hayan impulsado tanto el femenino es un orgullo. 
 
Susana Pérez Sole es una de las referentes en el fútbol femenino adaptado de Cataluña y, ahora también, de España. Fue de las primeras en jugar en ese equipo mixto que el Disport F.C. fundó. 
 
Tiene sus ventajas y desventajas. Físicamente son más potentes y a nivel físico nos exige un ritmo y una fuerza mayores, aunque luego al jugar con chicas lo veo transmitido en el juego, por lo que lo considero positivo, también. 
 
Susana sabe que el estigma está asegurado, pero también sabe que de una de las formas mediante la que se pueden cambiar estas cosas, como bien dice Jill Ellis, es el deporte- Queremos hacernos ver, somos mujeres y con parálisis cerebral, o sea, un conjunto de estigmas, desgraciadamente. Las personas con una diversidad funcional también existimos y somos capaces de muchas cosas, a nuestro ritmo, obviamente. Yo creo que si cada uno pone empeño puede llegar increíblemente lejos, ya sea trabajando, estudiando o con el fútbol. 
 
Hemos hablado muchas veces en esta web con gente que ha ido a la selección, que ha jugado y trabajado al máximo nivel para poder alcanzar ese logro futbolístico en el que se ve reconocido todo ello. Susana no será menos
 
Aún no me lo creo mucho, es increíble. Han sido tres años de mucho trabajo, de insistir, de ver si contaban más con el femenino, si conseguíamos subvenciones… Pequeños pasos que cuestan al principio, porque al ser el femenino, como en todo, cuesta más. Personalmente, tengo muchísimas ganas de empezar y de ver cómo funciona. 
Para nosotras es una suerte que se imponga la necesidad de tener una sección femenina en las modalidades paralímpicas porque así se presiona, indirectamente, a las federaciones. 
 
Susana, junto a muchas de sus compañeras tiene clara varias cosas y es que con trabajo y dedicación se puede llegar lejos. Su discapacidad le limita en unas cosas pero les ofrece otras que muchos de los demás no seríamos capaces de entender: diversidad, inclusión, lucha, garra, esfuerzo y empeño. Son mujeres y tienen parálisis cerebral. Son mujeres, tienen parálisis cerebral y juegan a fútbol. 
 
Para mí, es sacrificado porque tengo que compaginar trabajo y fútbol, es costoso. Aun así, es un deporte que me encanta, lo hago con gusto y considero que cada temporada adquiero más puntos positivos jugando y eso se ve plasmado. 
Poder jugar a fútbol es una oportunidad y una demostración de capacidad.
 
“Gracias por vuestro trabajo, es muy importante” Nos resaltaba Susana al final de la entrevista. Querida Susana, nunca será suficiente para todo lo que tenéis que decir.